Y todavía pasacallean mas YMAGUARE!?

Se descorchó el primer Cabernet de mayo, o el primer Cabernet Sauvignon de mayo que cuento, el uno, el alfa…
Empezaron las reconciliaciones en vísperas de junio, el número 6 arrastra siempre consigo cadáveres sonrientes ennegrecidos de misericordia y perdón como preparándose tradicionalmente la palabra que es corazón de adverbios feroces, para las fechas trasculturales de los apócopes de santos y nombre comunes apellidados también popularmente como De los Palotes, ya figuran y desfilan posibles fisonomías del judakái siguiente los rasgos pintados a mano y a odio inspirarían a cualquier artista versátil o a lo Dick, de mierda.
Nos preparamos para la cópula apetecible de Fernando Enrique Cardozo y Franciso Solano López. Para las bebidas post pérdidas emocionales a 3000 o mas guaraníes ofertados para el recaudo de mas bebidas pero en el viaje de fin de año de los estudiandos idiotizadamente reventados por la estupidez de las graduaciones de blanco largo de black tie de opulencia costosa de flashes y fortógrafos dictadores, de en fin etanol alevoso y comida sacra hasta sentir que la muñeca del esternón perdió pulso.
Y las pulseadas en las nupcias coygua, que siempre se anticipan a la fecha, nunca se aplazan, es como en la vida real, pero en realidad menos cara que esa moneda por lo menos en comparación al guaraní. Digamos como en la vida guaraní para despreciar el mestizaje y presumir Rhesusticamente lo que llevamos dentro, y sin hacer apologías extra-large y mononeurales a los cánticos pro equipos de fútbol.
Lo de estar encerrados y tener que pagar para que te encierren o te liberen. Bueno ordenando las ideas, porque es cierto, todavía no ha nacido quien entienda el desorden mío, y si naciera, nacería con el neonato mi pedofilia justificada por daños y perjuicios en la vía impúdica… como juntar dinero-plata-pirapire-viru es lo único que importa en estas fiestas más que…si es lo único que importa, se prepara un juego tan verosímil a la cultura paraguaya:
Primer Acto:
Alguien es dueño de un lugar alejado y privado de libertad (alguien es dueño de la libertad del otro) al cual titula “Cárcel”. Con el fin de (a pedido seductor del dinero de otros y como es todo un juego, la vida, la libertad, las expresiones, sensaciones, palpitaciones, alucinaciones, decisiones y negaciones) agarrar violentamente a alguien que jamás pensó ser víctima de las manos rabiosas del dueño del local y de sus secuaces, para bajo cerradura confinarlo en tan favorecido y jocoso lugar.
Segundo Acto:
Aparece un superhéroe de DC o de cualquier manguista japonés que ofrece gentilmente o con una desesperación inofensiva y cero propensa a infartos la mencionada palabra, en otra combinación de letras, los billetes mesiánicos que abrirían los cerrojos, las llaves con caras de mariscales y fragancias de EAU de toilette sudoríparas…. Para que el denunciado, ya sea por antojo de alguien que ofreció lo que se necesitaba o por simple apetencia fisiológica, pueda ser liberado. (Pueden haber excepciones, hay que marcar turno para los super Jirous… es verdad, hay probabilidades hercúleas de nubes oscuras y piscinas eléctricas si no aparecen, pero para esos casos está el llanto. Nada de qué preocuparse.)
Tercer Acto:
El ex presidiario puede caminar “en paz” con ojos hambrientos e intestinos cantores por el parque de diversiones gastronómicas y prueberas embarazosamente erróneas, hasta nuevo sigiloso y poderoso desembolso monetario. Claro.

¿Cómo se llama la obra?

R: Justicia Paraguaya

Es un chiste por eso está dividido en tres actos y pregunta al final el nombre de la patología, ahh perdón de la obra.

Son entendibles los jaja’s revienta pulmones que cualquier tabacalero envidiaría, porque no es un escueto chiste verde ni negro, es tricolor. Es rojo, blanco y azul. Tiene el triple de fervor, ¡y eso que ya pasamos los desfiles estudiantiles y las escarapelas en el pecho!